Gitana, flamenca por los cuatro costados, jonda como un pozo lorquiano y sin embargo, abierta a todo, un ejemplo de que la pureza ni se pierde, ni se contamina por beber de distintas fuentes.
Ha compartido escenario con Paco de Lucía, Camarón, La Orquesta Nacional de España, Noa o Yehudi Menuhim. Se llama Esperanza Fernández y es una de las grandes del flamenco de hoy y de siempre” (presentación de Jesús Quintero “Ratones Coloraos”, 22 de abril de 2008, Canal Sur Televisión).
Esperanza Fernández nos acompañará el próximo jueves en el Festival Flamenco Expomusic en Ifeza en Zamora, esta cantaora que ha ganado premios tan importantes como “El Giraldillo” en la XV Bienal de flamenco, ha publicado ya tres discos entre ellos “Mi voz en tu palabra”, con poemas de José Saramago, es una artista inquieta que no deja de pensar y participar en diferentes proyectos.
Esperanza, empezaste bailando, ¿Por qué el cambio?
Empecé bailando porque de niña, bueno de niña y ahora, pero con el tiempo y la experiencia pues lo llevo mejor; empecé bailando porque soy muy tímida y de pequeña aún más. Yo lo que tenía claro es que quería ser artista pero no sabía cómo desarrollarlo. A mí me gusta mucho el baile, es una de mis pasiones y por ahí arranqué, hice bastantes cosas, pero al final me di cuenta, y además mi padre también me insistía mucho, porque yo cantaba pero sólo en casa por vergüenza. Y, al final, tuve un percance con el baile, porque en un festival se me olvidó por completo el baile de puros nervios. Y a partir de entonces tomé la decisión de colgar la bata de cola y empezar a cantar.
Y ahora visto desde la experiencia, ¿cambiarías algo de tu carrera?
No, porque el baile también es mi pasión pero lo desarrollo en una poquita dimensión en mis finales, y también he hecho cositas de teatro en las que también he podido bailar, también en mis clases introduzco el baile… es como que ahí me desahogo del baile y me mantengo en paz.
Tus raíces son flamencas y siempre vuelves ahí, ¿qué tiene el flamenco?
El flamenco es mi pasión, es mi vida. Es una carrera muy larga que nunca se acaba de aprender y donde hay que buscar también horizontes nuevos, sobre todo para uno mismo. Desde que me levanto hasta que me acuesto yo siempre estoy pensando el próximo concierto dónde es… qué repertorio voy a hacer… o algún espectáculo nuevo… El día 15, por ejemplo hice un estreno en Sevilla al lado de José Miguel Évora, un concierto completamente nuevo que se llama “Alma” y fue todo un éxito y en un marco impresionante, ahí estamos siempre, por eso te digo que el flamenco para mi es todo.
Un consejo para alguien que está empezando
Hay que querer mucho el flamenco, y ser persistente y tener claro lo que quieres y seguir ese camino y no cansarte y amarlo y mimarlo y cuidarlo, porque los nuevos flamencos son el futuro. No se va a perder, el flamenco no se va a perder, pero sí es cierto que hay que trabajarlo mucho. Este es el consejo que me daba mi padre y me lo sigue diciendo siempre.
¿Quiénes son tus fuentes?
Todos, desde muy pequeña he sido una persona muy inquieta. He escuchado siempre mucha música. Es cierto que tengo mucha suerte porque Dios me ha dado una voz que me permite cambiar de registro, aunque yo soy cantaora de flamenco por supuesto. Pero también me
puedo permitir hacer otras cosas, cantar con una orquesta sinfónica, con bandas de jazz, hacer muchas cosas que, por supuesto, te enriquecen muchísimo, entonces a la hora de ponerme a hacer mi recital de flamenco, otro tipo de disciplinas pues a mí me ha pasado que me han
enseñado mucho y las he puesto encima del escenario para hacer mi recital.
Dime una actuación que te haya marcado especialmente.
La verdad es que tengo dos, cuando salí de la mano de La Familia Fernández, que mi padre creó y estuvimos muchos años trabajando, pues cuando salí de su mano me cogió Mario Maya, con él aprendí muchísimo. Con 16 años me subía al escenario para cantar y también actuar en
un teatro, entonces eso lo tengo grabado era una obra que se llamaba “El Amargo” de Federico García Lorca. Y luego otro espectáculo que me marcó y ya no me llamaban La Niña de Curro Fernández, sino que cojo mi nombre a partir de ahí, fue en el teatro Maestranza en el año 94 con Enrique
Morente. Fue cuando la gente en Sevilla empezó a creer mucho en mí y a partir de ahí mi carrera empezó a crecer como la espuma.
¿Qué te parece el cartel del Festival de Zamora?
Son artistas jóvenes pero con muchísima madurez, porque aman el flamenco, son personas que han crecido con el flamenco y su vida es el flamenco y eso se les nota muchísimo. Y estoy muy orgullosa, cada uno con su personalidad están aportando mucho al flamenco.
¿Sabes ya qué nos vas a ofrecer el jueves?
Pues como tengo un repertorio tan amplio aún no sé, es cierto que algo llevo preparado, pero algo bueno que tiene el flamenco es que como no hay partituras podemos improvisar en el mismo momento, y como te digo, aunque lleve algo preparado, pues cuando vea al público veré qué es lo que ellos quieren de mí y eso les ofreceré.
Muchísimas gracias Esperanza por este ratito.
Gracias a vosotros.
Entrevista realizada por Estefanía Regalado para Foro Flamenco Zamora
