Entrevista al cantaor Juan de la Morena

Juan de la Morena, inquilino del mundo, como se define a sí mismo, nos acompaña el sábado para el fin de fiesta en el Teatro Principal de Zamora, como parte de los actos homenaje a Isabelita de Jerez. Aunque no se dedica profesionalmente a cantar, proviene de una familia de artistas, y lleva en la sangre el arte. Su padre Fernando de la Morena es un cantaor muy reconocido y querido en el mundo del flamenco.


Juan destaca por su forma tan personal de interpretar el cante por bulerías, lleno de compás, herencia de su tierra, Jerez de la Frontera. Hemos querido conocerle un poco más y nos ha atendido sin reparos.

Lo primero, ¿cómo está tu padre? Nos hemos enterado que ha pasado por quirófano, en Zamora es muy querido.
Bueno, tiene un problema cardiovascular y han tenido que intervenirlo 2 veces por protocolo, pero todo ha salido bien.

¿Qué te parece el cartel del sábado en Zamora?
Como nosotros decimos aquí, el cartel es de Champions. Son todos personas muy entendidas de flamenco, las palmas, las guitarras, los cantaores, Jesús y Melchora.

Foto: Paco Barroso

¿Por qué no has decidido nunca hacerte profesional del cante?
Mi filosofía de vida no va enfocada a dar recitales de flamenco, no me veo cantando por soleá. Yo me considero festero. Nosotros, los de La Morena tenemos, digamos, el don de tener mucho compás, y entonces podemos meter cualquier cosa por compás. Mi desafío es siempre introducir canciones actuales, por ejemplo cuando estuvimos en Japón, en la primera clase les canté Doraemon por bulerías y los japoneses se tiraban por el suelo. Pero meterme a dar un recital no me gusta, entonces, ponerme a hacer una cosa que no me gusta, para mí no tiene sentido ahora mismo. A lo mejor de aquí a unos años cambio y lo convierto en mi forma de vida.

¿Qué escuchas?
Versiones flamencas tipo fusión como Niña Pastori, Parrita, Manzanita, Ketama… y en flamenco siempre bulerías, como las de Capullo de Jerez. Pero flamenco tradicional no, incluso hay veces que ni sé el palo que están cantando cuando voy a alguna peña. Es algo que no me llama la atención, respetando a todo el mundo, a mí lo que me gusta es ser festero. No me considero artista, soy festero. Pero es reconfortante que cuenten contigo, el otro día me llamó Antonio Malena, que cuenta conmigo para las bulerías, pudiendo escoger a personas de mayor nivel artístico, me llama a mí. O estar con Diego del Morao haciendo una aportación en su disco, cuando es uno de los mejores tocaores que hay. Diego Carrasco por el 50 aniversario también contó conmigo. Son pinceladas que uno hace pero que tendrán su huella siempre.

¿Cómo puedes compaginar tu trabajo con tantas actuaciones y colaboraciones?
Tengo una jefa que es jamón de la pata negra, y cuando tengo una actuación que no puedo compaginar con el trabajo no hay ningún problema porque hay confianza plena, como cuando me fui a Japón 17 días. Pero la mayoría de las veces lo puedo compaginar, es cuestión de planificarse.

¿Crees que el compás se puede aprender?
Yo creo que con el compás se nace, se tiene o no se tiene. Que por estar en un determinado sitio como puede ser Jerez de la Frontera se puede cantar algo aprendido, pues posiblemente se pueda, pero para tener compás de verdad hay que nacer con ello.

¿Qué esperas de tu visita a Zamora?
Pues espero que la gente se lleve una grata sorpresa conmigo porque van a ver algo diferente, hago cantes de mi padre por bulerías, aunque también me caracterizo por tener mi sello propio pero no dejo de tener parecido a él sin intentar imitarlo, son los genes. Haré bulerías de Jerez y también le comentaré al público que tengo las mías propias metidas en mis trabalenguas y en mi forma de ser. Espero que todo el mundo disfrute conmigo, los que no me conozcan, aunque hay veces que me quedo sorprendido y hasta avergonzado si me paran por la calle y me reconocen.

Quizás el vídeo viral del robot que se puso a bailar contigo sea uno de los ejemplos por los que te conoce más gente de la que tú crees.
Las redes sociales están ahí y hay cosas que no se pueden controlar. Manda castañas hacer bailar a un robot. Mira que hay gente que ha ido a Japón, figuras del cante, y vamos nosotros y a la media hora de estar allí hacemos bailar al robot. Recibimos mensajes de todo el mundo.

Juan es un placer hablar contigo estamos deseando disfrutar de tus bulerías el sábado, muchas gracias por atendernos. Y esperamos que tu padre se recupere pronto.
Gracias a vosotros. Nos vemos en el Teatro.

Entrevista realizada por: Estefanía Regalado para Foro Flamenco de Zamora